El ácido hialurónico es un componente natural de la piel que desempeña un papel crucial en su salud y apariencia. Su función principal es actuar como un humectante y un agente hidratante, capaz de retener grandes cantidades de agua en la piel.
Cuando se aplica tópicamente en forma de sérum, el ácido hialurónico tiene un efecto de hidratación profunda, esencial para mantener la piel suave y flexible y con un aspecto saludable. Rellena arrugas y líneas de expresión, brindando un aspecto más joven y terso. Mejora la elasticidad y firmeza de la piel y estimula la renovación celular.